El último mes del año siempre llegan a nosotros recuerdos de todo lo que nos ha ocurrido. Algunos, son negativos y nos producen emociones como la angustia, la culpa o el arrepentimiento y otros, son bonitos y agradables de recordar, pero nos conducen a la melancolía, la nostalgia.
Paralelamente, solemos hacer una lista mental de todos los objetivos que pretendemos cumplir en el próximo año. Pero, ¿dejamos espacio, entre pensamiento y pensamiento, para sentirnos agradecidos?
Te propongo que este año lo termines de una manera diferente. Te propongo que te tomes tan solo unos minutos para reflexionar, para meditar a cerca del agradecimiento. Los sucesos que has vivido los meses pasados tienen un valor incalculable. Te han conducido a donde te encuentras ahora, te han enseñado, te han hecho más grande, más maduro, más fuerte emocionalmente. Has crecido, ¿lo has notado? Siéntete bendecido y agradecido por estar vivo hoy, aquí y ahora, con todos los problemas que sientes que tienes, con toda la angustia que te produce el estar experimentando situaciones no deseadas, dolencias o incomodidades que no quieres para tu vida.
Lo que tu mente etiqueta como bueno o malo es maravilloso, es lo que te conduce a tu destino, lo que te ayuda a transitar tu karma. Estás aquí para evolucionar y lo estás haciendo de maravilla. Solo debes ampliar tu zona de confort, debes comenzar a experimentar agradecimiento por los acontecimientos negativos que llegan a tu vida porque lo hacen para enseñarte algo, lo hacen para conducirte a la verdadera felicidad. Puede que aún no lo creas así, pero con el trascurso del tiempo la comprensión llegará y advertirás como nada es causalidad, como todo lo que sucede oculta un motivo único y asombroso.
Experimenta el agradecimiento verdadero en tu corazón para poder sentir la vida en todo su esplendor. La vida es multidimensional, sutil y misteriosa. Está compuesta por un torrente de emociones negativas y positivas que juntas te guían hacia un deseado equilibrio. Súbete al tren de las emociones y permite que todo llegue a ti de manera suave. No te resistas. No confrontes. Este año proponte abandonar el control. Eso te producirá una enorme felicidad y un gran alivio.
El año nuevo traerá nuevas y abundantes experiencias que también te harán más grande. Una extraordinaria mezcla de personas, lugares, objetos y emociones que harán que cobre sentido lo que en un pasado te resultaba incómodo, incomprensible. Solo debes dejarte llevar por la corriente sutil que gobierna el Universo.
El próximo año proponte ser tú mismo. Sé genuino, sé auténtico. Haz que la luz que brilla en tu interior cobre vida terrenal para poder ver tus sueños hechos realidad. No temas. No permitas que el miedo te paralice, solo es una energía que se apodera de tu mente y que puedes disipar conectándote con la Fuente Infinita de Amor que te mantiene con vida. Suelta, que cuanto más lo haces más te viene. No dejes que los demás construyan tu autoestima, no pienses demasiado en conformar a tu entorno, solo debes serle fiel a tu corazón. Él es tu gran guía y nunca se equivoca. Enamórate de ti tanto como puedas y nunca dejes de soñar.
Dite: "Me siento agradecido por todas las experiencias que he vivido y abierto a todo lo que el Universo desee para mí. Todo está bien en mi mundo".
Feliz Año Nuevo!!!
Luz y Gael