top of page
  • Luz Boscani

Tú eres el milagro


¿Has pensado, alguna vez, a cerca del milagro de nuestra existencia?

Visualiza un árbol. No un árbol cualquiera, la secuoya gigante. Si no lo has visto jamás puedes visitar Internet dónde seguro encontrarás información. La secuoya gigante es un árbol de tres mil doscientos años que mide más de cien metros de altura y diez de diámetro. Parece mentira, ¿verdad?

Este magnífico y asombroso árbol ha nacido de una pequeña semilla. Una semilla que ya sabía que iba a ser gigante, aquella que contenía todas las peculiaridades de este extraordinario árbol. ¿Qué es lo que ha ocurrido para que esa semilla se haya desarrollado y haya crecido más de cien metros?

El misterio, el espíritu que vive en todo lo que nos rodea es la respuesta. El mismo espíritu que ahora miso hace posible que respires. Respira profundo y exhala todo el aire vaciando tus pulmones, vuelve a hacerlo y verás que al cabo de varias respiraciones tus ritmos se han aquietado. ¿Quién es el que respira?

Cuando tú, yo y todos los seres humanos de este mundo nacimos, lo hicimos a partir de una pequeña semillita. Un espermatozoide se unió a un óvulo y en ese punto microscópico en el vientre de nuestras madres se sabía cómo íbamos a ser, qué personalidad íbamos a tener, qué altura, qué dificultades, qué forma de ver la vida, qué carácter, se sabía todo. A partir de ese punto se han formado todos los órganos de tu cuerpo, todo ese mecanismo maravilloso que hoy apenas aprecias. ¿Cuánto valor tiene tu vida?

Todo lo que nos rodea es un milagro. Tú eres un milagro. Eres un misterio. Eres vacío.

Si contemplas a la Madre Tierra en todo su esplendor y te unes a ella, a su ritmo, podrás vivir una vida acorde con el milagro que eres. Hoy, probablemente, estés dormido, tengas dormida dentro de ti esa parte milagrosa que existe desde tu nacimiento. Despiértala, déjala ser, deja de maltratarla con tu desamor, tus deseos, tus ambiciones y tus pensamientos tóxicos para poder aprovechar su grandeza, para convertirte en ella.

Tú eres el milagro. Este no se encuentra allí afuera donde, continuamente, lo buscas. La naturaleza es un espejo. Refleja el milagro y el misterio que te construye. La naturaleza te muestra todo lo que llevas dentro. Está allí para recordarte de dónde vienes y qué eres realmente. Es un regalo de la Divinidad, que muchos ignoran, que te permite conectarte con tu parte poderosa. Es el canal más rápido que existe para que alcances la meta que ya eres tú.

Tú eres grande, solo que no lo sabes.

Continúa disfrutando la lectura de 21 respuestas en Amazon, iTunes, Google Play o en tu librería electrónica favorita.

bottom of page